Compartimos los principales highlights:
- Se están produciendo cambios culturales irreversibles en el sistema económico y en el ámbito organizacional. Los ambientes laborales, los modelos de capacitación, y hasta los espacios físicos de oficinas y lugares de trabajo están cambiando hacia modelos mucho menos rígidos que no siempre son verticales y que requieren de habilidades fluidas.
- Existe una necesidad creciente por definir perfiles adaptables, abiertos al cambio y basados en competencias, y no en desempeños cerrados.
- El no tener que desplazarse siempre al lugar de trabajo, los nuevos protocolos de comportamiento en videoconferencias y el hecho de que los colaboradores y trabajadores perciban una mejor conexión a través del videotrabajo exigen que las empresas y sus directivos opten por tecnologías y formaciones que acepten esa nueva realidad y se preparen para desarrollar una cultura de empresa cambiante, flexible y adaptable.
- La mejora de la productividad que se consigue con la tecnología y con la capacitación tiene que basarse en los objetivos de la empresa, pero también en la calidad de vida en el trabajo y en la adaptabilidad para la consecución de metas. Dicha mejora se traducirá probablemente en reducciones de jornada a finales de esta década.
- La conciliación (flexibilidad horaria, teletrabajo), la calidad de vida y la compatibilización con intereses y hobbies particulares están en este momento por sobre o al mismo nivel de la negociación salarial (Gallup 2019, Flexjobs 2020 y TOT/Newsbook 2019-20), indicador que muestra a las claras la nueva realidad en la que nos movemos.
- A finales de esta década se necesitarán menos trabajadores disciplinados y obedientes, pues muchos de los puestos de trabajo actuales serán ocupados por robots o máquinas con inteligencia artificial que tendrán un mejor desempeño. Pero sí se necesitarán colaboradores creativos, innovadores, empáticos y comprometidos. Muchas empresas ya han entendido este cambio, y ahora sólo falta incorporarlo al ADN de las organizaciones a todos los niveles. Y ningún cambio es fácil.
- En la vuelta a la normalidad pospandemia que se produciría en este 2022 se verá en Chile un cierto retroceso de las tendencias ya apuntadas en este informe, como está sucediendo en Europa y en muchas partes de Estados Unidos, y las empresas que no lo entiendan así y no aprovechen la situación para acelerar los cambios no llegarán bien preparadas al tipo de sociedad hacia la que avanzamos: mucho más digital y flexible.
Desde élogos, líder en la consultoría para la capacitación y la gestión del cambio, celebramos que la prioridad de las empresas en la nueva realidad sea la inversión en capacitación, especialmente en la formación a distancia, en la que somos especialistas.
Elogiamos también la apuesta decidida por la capacitación para la adaptación de los colaboradores a los cambios y a la nueva cultura organizacional de las empresas.
Para acceder al reporte completo, visite
https://www.elogos.cl/images/estudio_pospandemia_elogos.pdf